El Ejército reclutará y armará a civiles para reprimir y defender al régimen
El Ejército podrá armar civiles bajo una nueva “Reserva Patriótica” con el pretexto de defender la estabilidad y la paz. Organismos temen una nueva ola de represión con respaldo militar.


- Managua, Nicaragua
- marzo 27, 2025
- 08:51 AM
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En una peligrosa escalada autoritaria, el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo ha legalizado el reclutamiento y armamento de civiles a través de una nueva estructura militar llamada "Reserva Patriótica". Esta fuerza ahora parte formal del Ejército de Nicaragua y podrá ser activada en situaciones de “emergencia” o cuando, a juicio de los codictadores, se vea amenazada la “estabilidad y la paz”.
Así quedó establecido en la Ley de Reformas y Adiciones a la Ley No. 181, Código de Organización, Jurisdicción y Previsión Social Militar, aprobada este miércoles por la Asamblea Nacional a petición de Ortega y Murilo.
Organismos de derechos humanos alertan que la medida institucionaliza la represión y crea un brazo paramilitar legalizado para sofocar cualquier forma de disidencia.
En esta ley se incluye la Reserva Patriótica como un tipo de fuerza militar armada del Ejército de Nicaragua, que podrán ser integradas por civiles de todo el país que quieran “defender la paz”.
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“Las fuerzas militares de la Reserva Patriótica son parte del Ejército de Nicaragua, las cuales estarán integradas voluntariamente por oficiales, funcionarios, suboficiales, clases, soldados y marineros, que han pasado a la honrosa condición de retiro o licenciamiento del Ejército de Nicaragua, así como cualquier ciudadano o ciudadana que desee participar en la defensa armada de la nación para garantizar la estabilidad, la seguridad y la paz”, detalla la ley.
Aunque el discurso oficial habla de "defender la paz", la ley representa una grave amenaza a los derechos humanos y profundiza la militarización del país, advirtieron analistas y organizaciones de derechos humanos.
Esta estructura puede funcionar como una fuerza paralela de choque, similar a la “Policía Voluntaria”, que quedó institucionalizada en la última reforma a la Constitución Política de Nicaragua integrada por más de 50 mil personas en todo el país, incluidos empleados públicos obligado a enfilarse, según han denunciado.
En la "Policía Voluntaria" han sido enfilados paramilitares que reprimieron las protestas de 2018 contra la dictadura y que dejaron más de 350 muertos.
Entrenados para reprimir
En la iniciativa aprobada se aprueba la facultad que tendrán Ortega y Murillo para ordenar la intervención del Ejército de Nicaragua en apoyo a la Policía “cuando la estabilidad de la República lo requiera”.
“El Ejército podrá apoyar a la Policía Nacional, cuando la estabilidad de la República lo requiera y lo ordene la Presidencia y Jefatura Suprema del Ejército de Nicaragua”, destaca el texto.
El régimen ha interpretado como un ataque a la “estabilidad del país” y una “amenaza contra la paz” las legítimas protestas en su contra desde abril de 2018.
Esas manifestaciones fueron reprimidas por policías, paramilitares y también por el Ejército de Nicaragua, según el Grupo de Expertos en Derechos Humanos sobre Nicaragua de la ONU, aun cuando legalmente los militares no tenían competencias en materia de seguridad pública